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En multitud de ocasiones podemos sentir que nuestro camino en la vida es angosto ya sea en lo relacionado a nuestra vida personal o en el mundo laboral, ya que es  normal que sintamos desgana y desmotivación porque encontramos muchas piedras en el camino, y no son más que pruebas para darnos cuenta de que podemos seguir adelante a pesar de ellas. Es en ese momento cuando debemos mirar al frente sin detenernos, porque sin duda alguna nuestra voluntad es lo que más fuerza hace para resolver los conflictos a los que nos enfrentamos. Debemos de aprender a contactar con nuestro interior que en la mayoría de las veces no lo hacemos, poniéndonos a nosotros mismos las barreras más grandes y altas en la vida. De lo contrario, nada ni nadie tampoco nos podrá ayudar, ya que no hay ninguna fórmula mágica al respecto, solo son pautas que tenemos que seguir para avanzar y conseguir todo los que nos hace felices, incluso ese objetivo que tanta ilusión nos proporcionaría alcanzarlo. Aprendamos a valorarnos más, a creer en nosotros mismos, tener fuerzas, con este inicio empezamos a evolucionar para conseguir lo que queramos. Es igual que un gran cuadro, necesitaremos colores, pinceles, un buen tapiz, y perseverancia, así con todas estas herramientas con las cuales paso a paso se termina. Pues igual pasa con todo en la vida, es como un bonito cuadro que si empiezas pero no sigues trabajandolo con ahínco jamás podrás terminar para que luzca divino y adorne cualquier estancia.

El miedo es esa sensación que nos atormenta, nos perturba, nos decae, nos hace sentir como la vida se tambalea, es esa sensación de pánico que nos paraliza, por eso hay que aprender a que ese miedo nos abandone, por que si tropezamos tenemos la gran oportunidad de levantarnos y poder empezar. Nunca hay que rendirse, quien dijo que todo es fácil en la vida, si fuera así nada tendría valor, lo verdaderamente bueno tiene un coste, un esfuerzo, es entonces cuando valoras aquello que conseguiste o posees. La vida se trata de eso, de una lucha constante con la cual cuando conseguimos lo que anhelamos nos reconforta al alcanzarlo, y nos sentimos plenos, al igual que los problemas no debemos de olvidar de que siempre hay una salida, lo que sucede es que en multitud de ocasiones es como si nos pusiéramos unas gafas de sol muy grande y oscura, ¿a que no veríamos nada?, pero cuando empezamos a despegar poco a poco esas gafas de sol empezamos a visualizar todo más claro, con más luz, mucho más nítido. Así es el miedo, lo que nos impide ver, por eso cuando poco a poco nos vamos dando cuenta de que esa sensación nos abandona, cuando vamos quitándonos lo que nos enturbia la visión, vemos como avanzamos, ese avance el que nos hace recuperar nuevamente la ilusión, la misma que nos conduce a sentirnos mejor con nosotros mismos y a sentir una esperanza nueva, abriéndose un abanico de posibilidades que creíamos perdidas. Por tanto cuando lo abrimos, sentimos esa bocanada de aire fresco que tanto necesitábamos y nos impulsa a seguir con empuje y emoción. Ese día es el inicio de un nuevo despertar en nuestras vidas hacia la felicidad o ese éxito tan soñado. "No dejes que tus miedos te impidan avanzar." .

Adjunto un vídeo de you tube que me gustó y quise compartirles :https://www.youtube.com/watch?v=B27KHCiCMQE Esta es una muestra más de que la motivación ante cualquier obstáculo o meta que se quiera alcanzar que sirve de gran ayuda en nuestra vida al igual que tener una buena predisposición para que no nos quedemos anclados en un desanimo que no nos aporta felicidad o aquello que deseamos e incluso también que es nuestro sueño y así desechar todos esos pensamientos negativos, desechandolos de nuestra mente. Es el primer impulso que debemos tomar, un buen paso que necesitamos cuando en multitud de  ocasiones sentimos un gran vació viendo solo oscuridad. Es en ese momento cuando debemos abrir nuestra mente y pensamientos para que nos aporte esa luz necesaria que nosotros mismos no somos capaz de ver.